Los bomberos voluntarios de la ciudad de León vieron «al diablo por un hoyito» cuando le prestaban asistencia a Pedro José Castillo Reyes, de 27 años de edad, quien pesa más de 300 libras y en estado de ebriedad cayó sobre una acera.
La acera de un metro de altura respecto a la calle está ubicada el barrio El Laborillo de la ciudad de León, hasta donde llegaron los bomberos y por más de una hora se las ingeniaron para subir a la ambulancia a Chepe Reyes, quien resultó con una fractura en el cráneo y golpes en otras partes del cuerpo.
Una vecina, al ver la dificultad para trasladar al hombre obeso, prestó una puerta que había cambiado de su casa y un par de horcones nuevos para facilitarles el trabajo a los bomberos.
Chepe Reyes, entre jadeos y balbuceos, decía «déjenme que estoy bien, no pasó nada… de todas maneras no le intereso a nadie, me vale ver… »
Finalmente tras varios esfuerzos colectivos Chepe fue trasladado en un camioncito de acarreo al hospital Oscar Danilo Rosales.