Este sábado 23 de diciembre se cumplen 51 años del devastador terremoto de 1972 en la ciudad de Managua, evento que causó mayor dolor en miles de familias, porque la tragedia nuevamente dejó al descubierto que el gobierno de Anastasio Somoza, era indolente y criminal.
El historiador Clemente Guido, señaló que a Somoza no le importaba la situación, y se aprovechó dejando sin salario en el mes siguiente a la clase trabajadora, argumentando cínicamente que era para atender a la población, recursos que nunca llegaron.
Los mismos nicaragüenses encontraron respuestas para superar el terremoto que destruyó Managua, porque la corrupción de los Somoza no permitía atender las consecuencias, y fue por eso que el pelotero puertorriqueño Roberto Clemente, hoy héroe nacional, prefirió venir personalmente a dejar la ayuda a los nicaragüenses, perdiendo la vida en el vuelo, dijo Guido.
A diferencia de esa nefasta época, en la actualidad, las familias nicaragüenses, junto a las instituciones del Estado, fortalecen los mecanismos de respuesta y atención, frente a los fenómenos naturales, y son acompañados en todo momento.
Las inversiones en infraestructura en la capital son evidentes, entre ellos, la ampliación de la Pista Juan Pablo II, Calles para el Pueblo, el puerto más visitado, el Salvador Allende, el Paseo de los Estudiantes y Xolotlán, el nuevo parque Luis Alfonso Velásquez, el Polideportivo Alexis Argüello, las urbanizaciones Bismarck Martínez, entre otros emblemáticos proyectos.
El terremoto de 1972, que duró 30 segundos, sumado a las dos réplicas de gran magnitud, causó la muerte de casi 20 mil personas, centenares de heridos, y casi 300 mil damnificados.
A 51 años de esa tragedia, los nicaragüenses, tenemos un gobierno que trabaja para todos y anualmente desarrolla 4 ejercicios nacionales de preparación ante los fenómenos naturales, como el realizado ayer 21 de diciembre para continuar afianzando la cultura de cuido y prevención.