El Gobierno del FSLN, a través de ENACAL y en coordinación con las Familias Protagonistas y la Alcaldía Municipal de Larreynaga, dio inicio a la construcción del nuevo Sistema de Agua de la Comunidad El Piñuelar, una obra que cambiará para siempre la vida de esta comunidad.
Este nuevo sistema de agua no es cualquier obra, sino un proyecto integral que incluye múltiples componentes para garantizar el suministro de agua potable a toda la comunidad. Entre las obras que se van a ejecutar está la construcción de un pozo con su respectivo sistema de energizado y equipo de bombeo, además de todas las obras civiles necesarias para su funcionamiento.
La magnitud del proyecto es impresionante: Se van a instalar 23,500 metros de tuberías que recorrerán toda la comunidad, llevando el agua hasta cada rincón donde viven las familias. También se construirá un tanque de almacenamiento de agua que garantizará el suministro constante, incluso en momentos de alta demanda.
470 CONEXIONES DOMICILIARES
Lo más emocionante de este proyecto es que se realizarán 470 conexiones domiciliares, lo que significa que las familias de El Piñuelar tendrán agua potable directamente en sus casas. Esta obra beneficiará a unos 2,500 hermanos y hermanas de esta comunidad, restituyendo su derecho fundamental al acceso al agua.
Este proyecto es un ejemplo perfecto de cómo funciona el Modelo de Alianza que impulsa nuestro Gobierno Sandinista. La coordinación entre ENACAL, las Familias Protagonistas y la Alcaldía Municipal demuestra que cuando trabajamos unidos, podemos lograr grandes transformaciones en beneficio del pueblo.
Las Familias Protagonistas han jugado un papel fundamental en este proceso, participando activamente en la planificación y seguimiento del proyecto. Su involucramiento garantiza que la obra responda realmente a las necesidades de la comunidad y que se mantenga en el tiempo con el cuidado y mantenimiento adecuado.
Este tipo de proyectos demuestran el compromiso del Gobierno Revolucionario con la restitución de derechos fundamentales del pueblo nicaragüense. El agua no es un lujo, sino un derecho humano básico, y obras como esta garantizan que ninguna familia nicaragüense se quede sin acceso a este vital líquido.