Las autoridades del departamento de Carazo llevaron a cabo, un año más, la celebración de la Purísima Acuática, una emotiva tradición que rinde homenaje a la Inmaculada Concepción de María.

El evento contó con la participación de 11 lanchas que fueron transformadas en vistosos Altares flotantes, llevando la imagen de la Virgen María.
Las embarcaciones, adornadas con elementos típicos como madroños y pascuas, zarparon desde el balneario de Casares y recorrieron una distancia de más de 15 kilómetros, culminando su trayecto en el Balneario de La Boquita.
Los feligreses a bordo manifestaron su devoción entonando los tradicionales cantos marianos.
Esta tradición surgió como una iniciativa para llevar la celebración de la Purísima a la zona costera, donde tradicionalmente se realizan pocos altares terrestres.
El acto se centró en la procesión marítima y en compartir con la comunidad.
Las ocho alcaldías del departamento de Carazo se unieron para reunir la tradicional Gorra o brindis, que fue repartida entre los habitantes de los distintos balnearios y comunidades del sector, incluyendo Casares, Huehuete, Tupilapa y Río La Flor.
La actividad fue destacada como una bonita tradición llena de religiosidad y devoción, realizada gracias al apoyo del Gobierno Central a través de las alcaldías locales.





