Este fin de semana fue repatriado el cuerpo del nicaragüense Luis Adalberto López Peña, de 42 años, quien murió ahogado junto a su hijo Byron Adalberto López Fajardo, de 21, en el Río Bravo, en Piedras Negras, Coahuila, México, cuando intentaban llegar de forma ilegal a Estados Unidos.
Ambos fueron abandonados a su suerte en la oscuridad del río, la noche del 6 de febrero de 2024, por el “coyote” que les cobró una fuerte suma de dinero para guiarlos en su travesía hasta suelo estadounidense.
Su viaje comenzó el 26 de diciembre de 2023 en Nicaragua y duró 45 días hasta llegar a Piedras Negras, México, en donde encontraron la muerte.
El cuerpo de don Luis López fue recuperado por el Grupo Beta del lado mexicano y el de su hijo lo encontró la patrulla fronteriza en Texas, Estados Unidos, y aún está en proceso de identificación a través de pruebas de ADN.
El féretro de don Luis Adalberto López Peña fue llevado el viernes a Murra, Nueva Segovia, donde fue velado por su familia y amistades quienes posteriormente le dieron cristiana sepultura.