Doña Feliciana Aragón Vega, de 38 años de edad, propietaria del inmueble siniestrado, dijo que se enteró del hecho al escuchar los gritos de varios vecinos, pues el negocio lo tiene frente a su vivienda, sin embargo cuando salió a la calle, se percató que las llamas ya estaban devorando el local, por lo que no pudo salvar nada.
Juan Zeledón, jefe de turno de los bomberos de Santo Tomas, quienes atendieron la emergencia, indicó que el incendio se originó por el recalentamiento del sistema eléctrico del local propiedad de doña Feliciana.