Indignados se encuentran hermanos en la fe de la Iglesia Apostólica Unida, situada en carretera Vieja a León, luego que uno de sus miembros identificado solo como Junior, golpeara salvajemente al pastor Otoniel Ocampo, el pasado 29 de enero.
Hasta el momento se desconocen los motivos que tuvo Junior para lanzarse sobre el pastor y agredirlo a puñetazos hasta dejarle el rostro ensangrentado y los ojos morados, sin importarle que estaban en pleno servicio religioso.
Según hermanos en la fe, el tal Junior ya tenía meses de amenazar al pastor con golpearlo, y hasta matarlo, por no dejarlo subir al púlpito.
El día del ataque el pastor fue trasladado a un centro hospitalario, mientras Junior fue trasladado a las celdas policiales, donde estuvo por 48 horas, posteriormente, salió en libertad.