El Teatro Nacional Rubén Darío en Managua fue el escenario de un emotivo acto en conmemoración del 46 aniversario de la Revolución Islámica de Irán, un evento organizado por la Embajada de Irán en Nicaragua y el gobierno nicaragüense.
Durante la ceremonia, Nicaragua reconoció a Irán como un pueblo digno, valiente y fervoroso, destacando los lazos de hermandad y los valores comunes que unen a ambas naciones.
El encargado de negocios de la Embajada de Irán en Nicaragua, Abbas Mehraliyan, resaltó la importancia de este aniversario, que coincide con el triunfo de la Revolución Sandinista en Nicaragua.
«Estamos aquí esta noche para celebrar 46 años de la victoria de la revolución islámica en Irán, que coincide con el año en que triunfó la revolución sandinista en Nicaragua. Somos revoluciones hermanas con valores comunes e ideales compartidos», afirmó Mehraliyan.
El canciller de Nicaragua, Valdrack Jaentschke, enfatizó la colaboración entre ambos países en los espacios internacionales y los numerosos acuerdos de cooperación que han establecido.
«Irán y Nicaragua colaboramos grandemente en los espacios internacionales y tenemos también muchos acuerdos de colaboración, pero lo principal es el ejemplo de seguir luchando y venciendo al imperio«, declaró Jaentschke.
El canciller también recordó que, a pesar de los años transcurridos, ambos pueblos continúan enfrentados a las mismas fuerzas que han intentado someterlos.
«46 años después de esas gloriosas revoluciones, seguimos luchando, seguimos enfrentados al mismo imperio, seguimos enfrentados a aquellos que han querido someter a nuestros pueblos. Nuestros pueblos son libres y seguiremos luchando por la justicia, por el bienestar y por la paz en el mundo«, agregó.
El Asesor Presidencial para las Inversiones, Comercio y Cooperación Internacional, Laureano Ortega Murillo, reiteró el compromiso de Nicaragua e Irán en la lucha por un mundo mejor y multipolar.
«Estamos juntos en esta lucha por un mundo mejor, en esta lucha por un mundo multipolar, en esta lucha por la justicia, que quiere decir el derecho de los pueblos a desarrollarse bajo sus propias condiciones«, expresó Ortega Murillo.
Además, el asesor presidencial destacó los logros de Irán como nación autosuficiente, a pesar de las medidas impuestas por Estados Unidos y sus aliados occidentales.
«Admiramos los grandes logros que Irán ha obtenido, a pesar de lo que han sido medidas impuestas por Estados Unidos y sus aliados occidentales«, afirmó.
El 11 de febrero de 1979 marcó la victoria de la Revolución Islámica de Irán, un hito histórico que transformó al país en una nación autosuficiente en los ámbitos económico, tecnológico y militar.
A lo largo de estos 46 años, Irán ha defendido su patria y soberanía bajo los principios del Islam, consolidándose como un ejemplo de resistencia y desarrollo ante las adversidades.