La cifra de fallecidos en dos devastadores sismos que remecieron el sur de Turquía y el norte de Siria sube aproximadamente a 42.000 personas. A medida que disminuían las probabilidades de encontrar sobrevivientes 10 días después de la tragedia, algunos equipos de rescatistas extranjeros comenzaban a marcharse.
La agencia turca de manejo de desastres, AFAD, elevó el número de fallecidos a causa de los terremotos de magnitud 7,8 y 7,5 a 36.187.
Solo en Turquía, más de 108.000 personas resultaron heridas en los temblores del 6 de febrero, agregó la AFAD.
Es probable que la cifra de muertos siga aumentando mientras los socorristas buscan más cadáveres entre las ruinas de los miles de edificios caídos.
En el aeropuerto de Estambul, un grupo de pasajeros aplaudió en señal de gratitud a un equipo de 27 rescatistas griegos que regresaban a su país tras poner fin a su misión de búsqueda de sobrevivientes en Adiyaman, una de las ciudades más golpeadas.
En declaraciones a la agencia noticiosa estatal turca el miércoles en la noche, el jefe del equipo, Ioannis Papastathis, dijo que se marchaba de Turquía con “recuerdos inolvidables”.
“Por una parte, estaba el amor y la cálida acogida de la gente, por la otra el sufrimiento. La destrucción era enorme. El clima era frío. Todo esto me afectó mucho”, señaló Papastathis según fue citado por Anadolu.