El FBI confirmó que el padre del sospechoso del tiroteo en Las Vegas que ya deja casi 60 muertos y más de 500 heridos era conocido pues estaba en la lista de los 10 fugitivos más buscados por esa agencia.
Benjamin Paddock, padre de Stephen Paddock, autor de la masacre de la noche del domingo en Las Vegas, había huido de una prisión de Texas en 1968.
Paddock padre había sido sentenciado a 20 años de reclusión en el Centro Federal de Corrección en La Tuna, Texas, por asaltar el Banco Nacional de Valley en Phoenix en 1960, según los artículos de entonces publicados en el diario Tuscon Daily Citizen.
Según los informes de 1978 sobre Benjamin Paddock indican que el hombre, en ese entonces de 51 años, fue acusado de robo a mano armada en San Francisco tras haber escapado de una prisión federal en Texas donde estaba recluido tras haber sido sentenciado a 20 años de cárcel por robo de banco en 1960. Después de ese escape llegó a la lista de los más buscados del FBI.
El ladrón de bancos tenía múltiples alias, se lo conocía como Perry Archer, Benjamín J. Butler, y Leo Genstein, entre otros. Las autoridades de la época lo describían como un psicópata diagnosticado, con tendencias suicidas y, por lo tanto, «extremadamente peligroso».
Paddock mantuvo engañadas a las autoridades bajo una identidad falsa en Springfield, tanto que muchas veces recibió multas de tráfico y nadie sospechó nada.
Eric Paddock, hermano del atacante de Las Vegas, dijo que su padre había muerto hace varios años y que «nunca estuvo con mi mamá».
La familia Paddock sigue sorprendida por las acciones de Stephen Paddock y no han podido ofrecer ninguna idea sobre cuál sería el motivo. Stephen estaba armado con varios rifles. Se suicidó antes de que los policías pudieran entrar a la habitación del hotel en el casino Mandalay Bay.
El ataque dejó casi 60 muertos y más de 500 heridos, en el peor baño de sangre registrado en Estados Unidos en décadas.