Las intensas lluvias han causado graves daños en Brasil, superando los 130 milímetros en algunas zonas en pocas horas. Según el Instituto Nacional de Meteorología (Inmet), gran parte del territorio brasileño está en alerta debido a posibles lluvias intensas este domingo.
Una franja que se extiende desde el norte de Amapá hasta el suroeste de Rio Grande do Sul, pasando por 21 estados y el Distrito Federal, enfrenta pronósticos de altos volúmenes de lluvia y vientos intensos que podrían provocar inundaciones severas. En el centro-norte y este de Santa Catarina, y especialmente en Paraná, se pronostican tormentas aisladas por la tarde debido a un canal de humedad. En el extremo oeste de Rio Grande do Sul, se esperan tormentas al final del día.
Según Inmet, el domingo se prevé la formación de una amplia zona de baja presión en el centro al oeste de Rio Grande do Sul, que debería dar lugar a un ciclón que podría intensificarse y avanzar hacia el océano entre la noche del domingo y el lunes.
El gobernador de Santa Catarina, Jorginho Mello, informó que más de la mitad de las precipitaciones esperadas para todo enero cayeron en las primeras horas del temporal, afectando a numerosas ciudades y localidades balnearias. En Camboriú, la intendenta Juliana Pavan declaró el estado de emergencia debido a las fuertes lluvias. En Florianópolis, el epicentro del caos, muchos barrios quedaron completamente inundados, según Defensa Civil. Las intensas lluvias continuarán afectando las zonas de Bombinhas, Itapema, Porto Belo y Penha, con riesgos de más inundaciones.
El centro meteorológico advirtió que fuertes lluvias, tormentas eléctricas, acumulaciones de más de 50 mm en 24 horas y granizo podrían ocurrir, acompañadas de rachas de viento superiores a 80 km/h entre Rio Grande do Sul y Santa Catarina, especialmente durante el periodo de inestabilidad del lunes y martes.