Una avioneta se enredó con unos cables de energía y terminó hecha pedazos sobre una carretera en Chicago, Illinois. El accidente no dejó ni un solo sobreviviente, pues las cuatro personas que viajaban en la aeronave fallecieron al instante por el tremendo impacto.
Según las autoridades, todo pasó a unos 320 kilómetros al sur de la ciudad de Chicago. La avioneta, que era una Cessna 180, iba volando cuando de repente se enredó con los cables eléctricos que cruzan la carretera. El piloto no pudo hacer nada para evitar la tragedia.
Los cuatro tripulantes murieron en el lugar. La Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos ya confirmó el accidente y dijo que los que viajaban en la avioneta eran de un lugar que se llama Menomonie, en el estado de Wisconsin.
Una mujer que estaba cerca cuando pasó todo, de nombre Kynnedi Goldstein, le contó a CBS News Chicago lo que vio y escuchó: «Me estaba preparando para encender un programa cuando, de repente, oí un ruido. Fue como un ‘boom’, y luego se nos fue la luz por un segundo, y luego se encendió el generador.»
Y siguió contando: «Entonces salí a la terraza acristalada, miré y vi una enorme columna de humo«.
Las autoridades no tuvieron más remedio que cerrar toda la carretera el sábado para poder recoger los pedazos de la avioneta que quedaron regados por todos lados. Era un desorden completo: Partes del avión tiradas en el pavimento y todo cubierto por el fuego que consumió la aeronave.
La Policía Estatal de Illinois, a través de su Tropa 7, fue la encargada de atender la emergencia. Ellos confirmaron que los cuatro ocupantes eran de Wisconsin y que todos fallecieron instantáneamente.
Hasta el momento, las autoridades no han revelado quiénes eran estas cuatro personas que perdieron la vida en el accidente. No sabemos si eran familia, amigos o compañeros de trabajo que iban a algún lugar. Lo único claro es que todos venían de Menomonie, Wisconsin, y que ninguno logró sobrevivir.
Este tipo de accidentes no son tan comunes, pero cuando pasan, casi siempre terminan en tragedia. Las avionetas pequeñas como esta Cessna 180 son más vulnerables a problemas como enredarse con cables o tener fallas mecánicas que las pueden hacer caer.