Whitney Elizabeth Houston fue una de esas figuras clave en el mundo de la música, hija de la cantante de soul Cissy Houston, comenzó a formarse como cantante de gospel en un coro infantil de su Newarks natal, con tan solo once años.
Poco a poco fue introduciéndose en el mundo de la música, participó en los coros en el álbum “Think it over” de su madre y a partir de 1978 comenzaría a colaborar con otros cantantes como la gran Chaka Khan, Jermain Jackson o los Neville Brothers.
Aunque realizó trabajos como modelo e incluso apareció en la portada de varias revistas, su vocación era la música y acabó por centrar su carrera en el canto.
En 1985 lanzaría su primer álbum, “Whitney Houston”, que vendió 30 millones de copias y se convirtió en el álbum de debut con más ventas de una cantante femenina.
Desde entonces, Whitney Houston se convirtió en la cantante afroamericana más importante y reconocida del mundo.
El mayor éxito de sus canciones llegaría con “I will always love you”, de la banda sonora de “El guardaespaldas”, en la que la cantante también actuaba como protagonista junto a Kevin Costner.
Las apariciones en el cine y las giras mundiales se hicieron algo muy habitual en la vida de la cantante, actuando en el acto de clausura del mundial de fútbol de 1994 y esta relevancia hicieron que arrasara en los premios Grammy, Emmy o los American Music Awards. En total, su carrera acumuló 415 premios y galardones.
Lamentablemente su éxito profesional trajo unas terribles adicciones a las drogas y el alcohol, que causaron el ingreso en clínicas de rehabilitación.
Además, los rumores sobre malos tratos por parte de su marido, el cantante Bobby Brown, y el desorden de su vida privada ensombrecieron el mundo que rodeaba a la cantante.
Desde 2006, tras divorciarse, Houston relanzó su carrera y volvió a tener una activa vida social y artística. Su séptimo y último álbum, “I look to you” salió a la venta en septiembre de 2009.
Su muerte
Tres años después, en febrero de 2012, Whitney Houston fue encontrada muerta en la bañera de su apartamento por una sobredosis.
La cantante tenía 48 años cuando su canto se apagó definitivamente y tras su muerte, se dio a conocer el oscuro submundo que se esconde tras el glamour y la riqueza del mundo del espectáculo.