El incendio del complejo Wang Fuk Court en el barrio de Tai Po, Hong Kong, aumentó su saldo mortal a 160 víctimas casi dos semanas después del desastre, mientras autoridades continúan extrayendo cuerpos calcinados de los escombros. Seis personas permanecen desaparecidas por lo que se espera que la cifra siga subiendo en los próximos días, convirtiendo este desastre en el más letal ocurrido en territorio hongkonés desde 1948.

Entre los fallecidos recientemente identificados están una anciana y la trabajadora que la asistía en uno de los apartamentos devorados por las llamas.
Según reporta The Standard, de los 160 muertos confirmados, 120 han sido identificados mediante pruebas forenses, mientras el ADN de otros 40 cuerpos aún aguarda análisis para permitir la entrega de sus restos a familiares. Las autoridades chinas también examinan restos humanos hallados en las inmediaciones que podrían corresponder a víctimas adicionales atrapadas en el caos.
Investigaciones preliminares apuntan a que los materiales de construcción utilizados en la renovación del complejo, específicamente andamios y espuma de protección en ventanas, actuaron como acelerantes del fuego, transformando el edificio en una trampa mortal que imposibilitó la evacuación segura.
Estas conclusiones provisionales sugieren negligencia en los estándares de seguridad durante las obras, por lo que más de una decena de personas han sido detenidas mientras se profundiza la cadena de responsabilidades.
Los agentes de Policía involucrados en las labores de búsqueda comenzaron a recibir apoyo psicológico debido a la dimensión de la tragedia. La exposición continua a escenas de devastación, cuerpos irreconocibles, familias destrozadas, el olor penetrante de la muerte, ha causado secuelas emocionales en quienes trabajan sin descanso entre los restos del rascacielos convertido en un cementerio vertical.
El siniestro supera en letalidad cualquier incendio registrado en Hong Kong desde el año de 1948, cuando una explosión seguida de fuego en un almacén de Shek Tong Tsui mató al menos a 176 personas.