Según los familiares de Lucía Leticia Bravo Murillo, su vida ya estaba marcada por los abusos de su hermano Nahúm Isaí Bravo Torres, quien pasó de hurtarle una laptop en febrero del 2010 hasta robarle la vida en marzo de este año.
Lucía Leticia fue la primera víctima mortal de su hermano Nahúm Bravo, quien aprovechando que estaba sola en la casa, el 26 de marzo la agarró por la espalda para que su cómplice Jairo José Ugarte la matara a punta de navajazos.
Según los registros judiciales, el 22 de febrero del año 2012, Lucía acusó a Nahúm ante el juez octavo local de lo penal, por los cargos de “asedio, hurto, estafa o apropiación de menor cantidad”, por habérsele llevado la computadora portátil.
Ante el judicial el caso llegó a una mediación parcial con el compromiso de Nahúm de devolverle la laptop a Lucía al llegar a la vivienda, acordando además respetarse y no agredirse ni física ni verbalmente.
Al pasar de los días, Nahúm se “hizo el loco” con lo acordado y el 28 de febrero del mismo año 2012, Leticia Bravo llegó nuevamente a los juzgados a querer iniciar un proceso contra su hermano por no entregarle la laptop, sin obtener resultados positivos.
Otra con la que Nahúm también llegó a una mediación parcial por problemas familiares fue con su ex mujer Yalmara Peralta Rodríguez, con quien el 30 de agosto del 2011, firmó un acuerdo para mantener la tranquilidad, la paz y la convivencia social.