Una devastadora catástrofe natural ha golpeado la región oriental de España, dejando un saldo trágico de 205 personas fallecidas en lo que se considera el peor desastre climático que ha enfrentado Europa en las últimas cinco décadas.
La comunidad valenciana es sido la más afectada por esta tragedia, registrando 202 víctimas mortales. Las regiones de Castilla La Mancha y Andalucía también han reportado pérdidas humanas, sumando tres fallecimientos más.
El gobierno español movilizó 500 militares para las labores de búsqueda y rescate de personas desaparecidas, así como para brindar asistencia a los sobrevivientes. Mientras tanto, una nueva alerta meteorológica se activó en Huelva, en el suroeste del país.
Ángel Víctor Torres, ministro de Cooperación con las Regiones de España, advirtió en conferencia de prensa que la cifra de fallecidos podría aumentar, ya que decenas de personas permanecen sin ser localizadas.
La magnitud de la catástrofe se refleja en los daños a la infraestructura: Aproximadamente 75 mil hogares continúan sin servicio eléctrico.
Los bomberos han tenido que recurrir a medidas extraordinarias, extrayendo gasolina de vehículos abandonados para alimentar generadores y restablecer el suministro eléctrico en los hogares.
La causa de esta tragedia fue una precipitación sin precedentes: El equivalente a un año de lluvia cayó en tan solo ocho horas durante la noche del martes, provocando la destrucción de carreteras, vías férreas y puentes debido al desbordamiento de los ríos.
Van más de 200 muertos pero aún hay 800 desaparecidos y no tienen ayuda del gobierno. Mi corazón se retuerce al ver las imágenes de esas calles que tanto me enamoraban cada día en #Valencia pic.twitter.com/FBkOaiq8jM
— Salva (@SalvaRosalesSV) November 1, 2024