La joven Ana Rosa Amador Hernández, de 21 años, fue asesinada la mañana de este domingo a manos de su ex pareja José Rafael Reyes, también de 21, en la localidad de Sapoá, ubicada en el municipio fronterizo de Cárdenas, en el departamento de Rivas.
Amador Hernández fue encontrada agonizante en el interior de la vivienda de madera de donde hace 5 días atrás tuvo que huir, ante las constantes amenazas de muerte que le realizaba José Reyes.
El hallazgo fue realizado por Erick Caracas, quien detalló que iba a arrear un ganado cuando volteó a ver a la casa que tenía la puerta abierta y miró a la fémina tirada en el suelo, en un charco de sangre.
De acuerdo con Caracas, la joven tenía poca ropa puesta y presentaba una puñalada en el abdomen, muriendo a los pocos minutos de haberla encontrado en el inmueble.
LLEGÓ A SACAR ROPA Y LA MATARON
Familiares de la víctima dijeron que Ana Amador estuvo en una fiesta la noche del sábado, luego se fue a dormir a casa de su mamá y a eso de las 5 de la mañana de hoy domingo se fue a sacar ropa a la casa donde vivía con José Reyes.
“Él aprovechó que estaba solo con ella para matarla”, dijo Adriana Amador, de 18 años, hermana de la ahora occisa.
La desgarrada joven detalló que la noche del sábado, José Reyes llegó a la casa de su ex suegra para rogarle a su víctima que regresaran, pero esta le contestó que no quería nada con él y luego se fue a la fiesta.
JURO MATARLA
Los parientes de la ahora occisa manifestaron que tres días atrás, durante una discusión, José Reyes amenazó con matar a la joven con quien inició una relación desde que ambos tenían 13 años de edad.
“Le dijo que la iba a matar y le iba a mandar la cabeza a mi mamá”, expresó Ana Amador.
El crimen ocurrió en la casa del padre de la ahora occisa donde la pareja había procreado una hija que actualmente tiene 3 años de edad, y queda en la orfandad.
Autoridades policiales investigan el paradero del pescador José Rafael Reyes, quien tras cometer el crimen huyó con rumbo desconocido.