Un nicaragüense de apellidos Díaz Valdivia, de 46 años de edad, fue sentenciado a 218 años y ocho meses de prisión por el Tribunal Penal de Santa Cruz, en Guanacaste, Costa Rica, por violar y embarazar a su hija.
De acuerdo con la acusación, además de cometer 19 violaciones calificadas en perjuicio de la menor de edad, el depravado también la ofreció al menos cuatro veces para actos sexuales remunerados.
Los hechos ocurrieron entre noviembre del 2014 y enero del 2024, en una propiedad en Santa Cruz, donde vivía la familia, según la prueba aportada por la Fiscalía.
El libelo acusatorio indica que Díaz aprovechaba la cercanía con su hija, que en ese entonces tenía 12 años, para cometer las agresiones sexuales.
De acuerdo con la acusación, Díaz amenazó a la víctima con matar a su mamá, para que no le contara a nadie, y producto de las violaciones, la niña resultó embarazada.
Durante el proceso, Díaz Valdivia se sometió a un procedimiento especial abreviado, durante el cual admitió los cargos en su contra.
Por lo anterior, no fue necesario que se desarrollara el juicio, y por una disposición legal, llamada regla del concurso material, el monto de cárcel por descontar podría ser readecuado por el Tribunal Penal de Santa Cruz a 32 años.
Esa regla se aplica cuando una persona comete más de un delito, en diferentes momentos, y mientras la sentencia quede en firme, Díaz Valdivia deberá de esperar en las cárceles preventivas.