1. Nada de pasar tiempo bajo el sol
Tu piel necesita un tiempo para descansar de los daños producidos por los rayos solares. Además, puede que tu epidermis se encuentre sensible y reaccione de forma adversa a los químicos del facial, sobre todo sí este busca disminuir la aparición del acné.
2. Pospone tu exfoliación
Ingredientes como el retinol y ácido glicólico, presentes en este procedimiento, pueden sensibilizar la piel (irritarla). Si no puedes esperar para exfoliar tu piel, procura hacerlo de tres a cuatro días antes del facial.
3. No lastimes tu cutis
Ese barro o espinilla podría parecer tentador, pero lo único que vas a conseguir al exprimirlo es lesionar, inflamar, y en algunos casos infectar la herida.
4. Adiós a las pestañas postizas
El pegamento utilizado para las pestañas no se puede frotar o tiene vapores o ingredientes que demoran 48 horas en deshacerse.
¡No debes olvidar! La higiene es básica para antes de un facial, aunque esto no indica que vas a frotar el rostro hasta irritarlo. Únicamente trata de mantenerlo limpio lavándolo dos veces al día con un poco de jabón neutro y agua fría.