El estadounidense Steven Marks, de 31 años de edad, fue arrestado el pasado 2 de Febrero en el condado de Rockwall, en Texas, por intentar vender a su hija de tan sólo 14 años de edad como una esclava sexual a dos familias diferentes.
Según las investigaciones Marks vendió a su hija a una familia ubicada en Chicago por unos 17 mil 500 dólares para que fuera la esposa de un jovencito de 17 años. Éste la envió a Illinois tras recibir el pago inicial equivalente al 50% de la suma acordada. Pero luego de unos pocos meses la sacó del lugar al no recibir el resto del dinero.
Posteriormente comenzó las negociaciones para venderla nuevamente como esclava sexual a una familia en La Florida. La menor en un descuido del hombre y de sus propios abuelos pudo escapar y llamó al 911 desde un restaurante de comida rápida.
La policía también arrestó a su esposa Lila Miller y a sus padsres identificados como Davy y Dorothy Marks. Ellos niegan todos los cargos asegurando que la menor se fugó de la casa para irse a vivir con su novio.
Las autoridades le impusieron una fianza de un millón de dólares a este degenerado padre.