Un gigantesco incendio destruyó varios depósitos de petróleo y lanchas que eran utilizadas para transportar gasolina de contrabando en las costas de Jiwani, en Pakistán.
El siniestro fue provocado por un cortocircuito en una plata eléctrica y se expandió rápidamente a los depósitos cercanos y todas las lanchas que se encontraban cerca.
Afortunadamente las llamas, que fueron sofocadas hasta horas de la tarde, no dejaron muertos ni heridos.