El Buró Federal de Investigación (FBI) reconoció que cometió un error al no haber seguido los protocolos oportunos cuando fue alertado en enero del comportamiento agresivo de Nikolas Cruz, el joven que mató a 17 personas en un tiroteo el miércoles en una escuela de Florida, Estados Unidos.
En un comunicado, el director del FBI, Christopher Wray, pidió disculpas a las familias por el “dolor adicional” que esto pueda ocasionarles.
“Todavía estamos investigando los hechos. Estoy comprometido con llegar al fondo de lo que ha ocurrido en este asunto en particular, y también en revisar nuestra forma de responder a información que recibimos del público”, añadió Wray.