La sonda china Chang’e-6 acaba de regresar a la Tierra después de permanecer en la Luna durante 53 días. ¡Y no viene con las manos vacías!, trae muestras del subsuelo y la superficie de la cara oculta de nuestro satélite natural; lo cual tienen emocionados a los científicos.
El aparato, que venía bajando desde una altura de 5,000 kilómetros sobre el Atlántico sur, tocó tierra a las 2:07 de la tarde hora de China en el distrito Siziwang Banner, en la región autónoma de Mongolia interior.
Según la Administración Nacional del Espacio de China (ANEC), el módulo de retorno entró en la atmósfera a eso de la 1:41 de la tarde, viajando a una velocidad de 11.2 kilómetros por segundo.
Apenas aterrizó, los equipos de recuperación no perdieron tiempo. Izaron la bandera china y empezaron a alistar la cápsula para mandarla rápidamente a la capital Pekín. Allá la van a abrir para sacar las muestras que trajo de la Luna.
El director de la ANEC, Zhang Kejian, no cabía de la emoción cuando anunció: «La misión lunar de la Chang’e 6 ha finalizado con éxito». Y no es para menos, porque con esta hazaña, China se convierte en el primer país del mundo en ser capaz de traer muestras de la cara oculta de la Luna.
Pero ojo, que esto es solo el comienzo. Los chinos ya están planeando dos misiones más para explorar el polo sur lunar. Hasta tienen planes de construir una base científica allá arriba junto con los rusos.