La víctima en este doloroso caso es Thanat Thangtewanon, quien sufrió un enorme mordisco en los testículos al sentarse en el inodoro de su casa, en Tailandia.
“Sentí que algo me mordía los testículos. Me dolía mucho, así que metí las manos en el inodoro para ver qué me pasaba. Me sorprendió mucho haber agarrado una serpiente”, comentó.
Tras notar que tenía una serpiente en la mano, “me levanté rápidamente y la saqué. Sentí dolor, un dolor muy fuerte, y había sangre por todas partes, pero lo que más me sorprendió fue encontrar una pitón en el inodoro”.
Para salvar su testículo, el hombre no tuvo más remedio que agarrar su cepillo dental y empezar a golpear a la pitón hasta matarla.