El 12 de octubre de 2017 está previsto que el asteroide 2012 TC4 pase peligrosamente cerca de la Tierra. La distancia exacta de su aproximación más cercana es incierta, así como su tamaño, según difundió Europa Press.
La agencia explicó que basándose en las observaciones en octubre de 2012, cuando la roca espacial se aproximó a nuestro planeta, los astrónomos estimaron que su tamaño puede variar de 12 a 40 metros. El meteoro que explotó sobre la ciudad rusa de Chelyabinsk, en febrero de 2013, hiriendo a 1.500 personas y causando daños en más de 7.000 edificios, tenía unos 20 metros de ancho. Por lo tanto, el impacto de 2012 TC4 podría ser aún más devastador.
“Es algo en lo que hay que mantener los ojos”, dijo a astrowatch.net Judit Györgyey-Ries, astrónoma del Observatorio McDonald de la Universidad de Texas. “Podríamos ver una explosión en el aire que tal vez rompa las ventanas, dependiendo de dónde ocurra”.
El asteroide del tamaño de una casa fue descubierto el 4 de octubre de 2012 por el Observatorio Pan-STARRS en Hawaii. Una semana más tarde, pasó a una distancia de 0.247 LD (distancia lunar), o 94.800 kilometros. 2012 TC4 es un objeto alargado que gira rápidamente. Europa Press detalla que los científicos tratan de determinar la ruta exacta de 2017 y la probabilidad de un posible impacto. “Tiene un 0,00055% de probabilidad acumulada de que va a golpear”, dijo Györgyey-Ries. “El hecho de que la MOID (distancia mínima intersección órbita) está a sólo 0.079 LD lo convierte en un posible impactador. Sin embargo, es sólo la menor distancia posible entre las órbitas”.
“Hay una entre un millón de posibilidades de que pueda llegar a nosotros”, dijo Detlef Koschny, jefe del Segmento de Objetos Cercanos a la Tierra (NEO) de la ESA. También trató de estimar el tamaño exacto del cuerpo celeste. El tamaño se estima a partir de la luminosidad, pero no sabemos la reflectividad, por lo que podría ser menor o mayor, aunque se asuma de 10 a 40 metros.
Un objeto de 40 metros compuesto de hierro podría pasar por la atmósfera y hacer un cráter. Un objeto rocoso de 10 metros apenas se notaría. Makoto Yoshikawa de la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA), miembro de la División de NEO en la Unión Astronómica Internacional (IAU), está convencido de que el asteroide no representa ningún peligro para la Tierra. “La distancia es muy pequeña. Pero esta distancia no significa una colisión”, dijo.
Vigilancia de Asteroides de la NASA ha asegurado que no hay posibilidad de que este asteroide golpee nuestro planeta, pero Györgyey-Ries admite que se necesitan más observaciones para mitigar las incertidumbres.