En un acto político-cultural llevado a cabo en la Casa de la Amistad Argentino-Cubana, Nicaragua se sumó a la voz de resistencia contra las agresiones imperialistas y colonialistas.
El evento, titulado «Por el fin del Bloqueo y las sanciones. Por la autodeterminación de los Pueblos», estuvo organizado por la Federación Internacional de Escritoras y Escritores por la Libertad, la Organización Libres del Pueblo, y el Frente Cultural Che Adelita.
La ceremonia inició con palabras de Rubén Luis Zaccaro, Presidente de la Casa de la Amistad Argentino-Cubana, y el escritor Leonardo Herrmann, Secretario General de la Federación Internacional de Escritoras y Escritores por la Libertad.
Ambos enfatizaron la importancia de la solidaridad internacionalista, con un enfoque particular en denunciar las agresiones contra naciones que eligen un camino de libertad, soberanía y dignidad.
Nicaragua estuvo representada por el Embajador Carlos Midence, quien transmitió un saludo revolucionario de parte del Presidente de Nicaragua Daniel Ortega, y de la Vicepresidenta Rosario Murillo.
Midence resaltó la resistencia de Nicaragua frente a las sanciones, calificándolas como agresiones. «A pesar de la adversidad y las agresiones a nuestro país, los logros del Sandinismo en beneficio de las familias nicaragüenses continúan avanzando sin pausa», afirmó.
Además, denunció las históricas tentativas de dominio de Estados Unidos sobre América Latina, y sobre Nicaragua en particular. Según Midence, estas tentativas incluyen agresiones, amenazas, chantajes, invasiones, asedios, bloqueos, y el apoyo a movimientos golpistas.
El acto contó con la presencia de destacados internacionalistas, escritores, periodistas y académicos, así como los embajadores de la República de Cuba, Pedro Pablo Prada, y de la República Bolivariana de Venezuela, Stella Lugo de Montilla.
Ambos embajadores se sumaron a las denuncias contra las agresiones imperialistas hacia sus respectivos países.
Este evento es una muestra más de cómo las naciones están uniendo fuerzas, no solo para resistir sino también para denunciar y buscar un cambio en las políticas de agresión que afectan la soberanía y la autodeterminación de los pueblos.