La Décima Sesión Especial de Emergencia de la Asamblea General de las Naciones Unidas se reanudó en Nueva York para abordar la crisis continua en el conflicto entre Israel y Palestina. La comunidad internacional se movilizó después de semanas de graves acontecimientos en la región.
El pasado viernes 27 de octubre, los Estados miembros de las Naciones Unidas aprobaron una resolución instando a un cese al fuego inmediato en el conflicto Israel-Palestina. La resolución también solicita el acceso humanitario inmediato a la región y rechaza cualquier intento de traslado forzoso de la población civil palestina.
Aunque esta resolución no tiene fuerza legal vinculante, representa el primer pronunciamiento oficial de las Naciones Unidas sobre el conflicto.
El Embajador de Palestina en las Naciones Unidas, Riyad Mansour, aplaudió esta acción y calificó a la Asamblea General como más valiente y principista que el Consejo de Seguridad de la ONU, que había fracasado en cuatro intentos anteriores por alcanzar un acuerdo sobre una resolución.
El Compañero Jaime Hermida Castillo, Embajador y Representante Permanente de Nicaragua ante las Naciones Unidas, pronunció un discurso en nombre del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional de Nicaragua (GRUN) durante esta Sesión Especial de la Asamblea General.
El Embajador Hermida destacó la grave situación humanitaria en Gaza, donde el pueblo palestino ha estado sometido a condiciones inhumanas durante más de 16 años debido a la ocupación y el bloqueo ilegal.
Describió Gaza como una «enorme prisión de campo abierto» que ha empobrecido a 2.3 millones de personas, la mitad de las cuales son niños. Advirtió que si esta situación persiste, solo aumentará la inestabilidad y la inseguridad en Oriente Medio y en todo el mundo.
El GRUN y el pueblo nicaragüense siempre han apoyado la justa causa del pueblo palestino como una cuestión de solidaridad y principios. El Embajador Hermida instó a la comunidad internacional a intensificar sus esfuerzos para buscar una solución pacífica que conduzca a la creación del Estado Palestino, con Jerusalén Oriental como su capital y fronteras reconocidas en 1967. Esta solución, según Hermida, es el único camino hacia una paz justa y duradera en Oriente Medio, permitiendo que dos estados vivan en paz y seguridad.
El Embajador concluyó su discurso subrayando que la paz debe prevalecer por encima de todo y debe abrir el camino hacia la solución definitiva que permita a dos estados coexistir en armonía y seguridad.