El grupo terrorista Estado Islámico (ISIS) se adjudicó el atentado terrorista en un concierto de música pop en la ciudad inglesa de Manchester, donde al menos 22 personas murieron y 59 resultaron heridas.
«Con la ayuda y el apoyo de Alá, un soldado del califato logró hacer estallar explosivos en medio de una reunión de los cruzados en la ciudad británica de Manchester», dice el comunicado publicado por los yihadistas y divulgado por el sitio de monitoreo yihaadista Site.
«En venganza por la religión de Alá, en un esfuerzo por aterrorizar a los infieles y en respuesta de sus transgresiones contra la tierra de los musulmanes.», agrega.
(Segundo comunicado enviado por el grupo terrorista, esta vez a través de su agencia de noticias Amaq)
Según el breve texto, los explosivos se detonaron en el «desvergonzado» teatro en el que la cantante Ariana Grande celebraba un show frente a 21.000 personas. Si bien por el momento se conocen 22 muertos y 59 heridos, los yihadistas dicen haber asesinado a 30 y herido a otros 70.
«Lo que viene ahora será aún más severo para los adoradores de la Cruz y sus aliados, con el permiso de Alá», advierte. «Todas las alabanzas para Alá, señor de la creación», concluye.
La adjudicación llega más de doce horas después del ataque, pero los simpatizantes del grupo comenzaron a celebrarlo poco después de haber ocurrido.