Un niño de 10 años fue capturado en Florida, Estados Unidos, luego de que estuvo enviando mensajes de amenaza en los cuales indicaba que usaría un arma para hacer un tiroteo masivo en una escuela cerca de donde vive.
Al momento de allanar su vivienda, los agentes se dieron cuenta que era un adicto a juegos de guerra entre ellos, Free Fire, Call of Duty, Sniper Elite, entre otros.
«El comportamiento de este estudiante es repugnante, especialmente después de la reciente tragedia en Uvalde, Texas», indicó Carmine Marceno, alguacil del condado de Lee.
Por ese motivo, los detectives se entrevistaron con el menor y se decidió su detención por amenazar con realizar el tiroteo masivo.
Ahora, el menor se encuentra a cargo de la División de Investigaciones Criminales de Servicios Juveniles.