Los astrónomos hicieron este hallazgo tras detectar a través del telescopio TRAPPIST, instalado en el Observatorio La Silla (Chile) que esta estrella se desvanecía a intervalos regulares, lo que significa que varios objetos pasaban entre ella y la Tierra.
Según los astrónomos, la estrella TRAPPIST-1, que se encuentra en la constelación de Acuario (El aguador), es una estrella enana débil, más fría y roja que el Sol, y de un tipo muy común en la Vía Láctea, pero se trata de la primera vez que se descubren planetas gravitando a su alrededor.
Los hallazgos de este estudio, que publica la revista Nature, son defendidos con entusiasmo por Emmanuël Jehin, uno de los científicos involucrados.