Una falsa cirujana plástica ha sido condenada en el condado de Broward (Florida, EE.UU.) a 10 años de prisión y cinco años de libertad condicional, tras ser declarada culpable de realizar operaciones con inyecciones tóxicas y de perpetrar el homicidio de una de sus pacientes ilegales, informa el diario ‘New York Post’.
La pseudocirujana Oneal Ron Morris, una mujer transgénero de 36 años de edad, ya había sido condenada a más de un año de prisión en el 2013 por inyectar materiales tóxicos. Tras librarse de ir a la cárcel, se le presentaron nuevos cargos por causar daños a la salud de varias personas.
Durante las operaciones la condenada utilizaba la combinación de cemento, pegamento, silicona y aceite mineral. Se conoce que había aplicado ese tipo de sustancias en su propio cuerpo, el cual luce severamente deformado.
La víctima mortal, Shatarka Nuby, de 31 años de edad, había recibido de Morris 10 inyecciones entre los años 2007 y 2010 y había pagado por el servicio 2.000 dólares, según precisa el canal WSVN. La mujer falleció en el 2012 debido a «una masiva migración sistémica de silicona» por las inyecciones aplicadas en sus nalgas y caderas.
La salud y la apariencia de las otras mujeres, que llegaron a un acuerdo con Morris sobre las operaciones, se vieron gravemente afectadas. En particular, la mujer transgénero Rajee Narinesingh se realizó varias cirugías en el 2005 para agrandar su pecho, caderas, labios y mejillas, que desfiguraron su aspecto y la obligaron a acudir a verdaderos profesionales de la salud y la estética.