El 9 de diciembre, el ministro de Sanidad de Queensland, Tim Nicholls, reveló que en 2021 desaparecieron 323 muestras de virus vivos, incluidos el virus Hendra, el lyssavirus y el hantavirus, debido a un grave incumplimiento de los protocolos de bioseguridad.
Aunque las autoridades australianas no han esclarecido el destino de las muestras, han descartado que se trate de un robo con fines maliciosos.
El incidente ha provocado investigaciones y medidas de seguridad más estrictas. La desaparición ocurrió en el laboratorio Public Health Virology Laboratory, donde un fallo técnico y la falta de documentación adecuada durante el traslado de las muestras contribuyeron a la pérdida. Las autoridades creen que es probable que las muestras hayan sido destruidas mediante un proceso estándar, pero esto no fue registrado correctamente.
El Gobierno de Queensland ha iniciado una investigación oficial para determinar las causas del incidente y mejorar los protocolos de seguridad. También se han implementado medidas correctivas, como la capacitación adicional del personal y una auditoría de los permisos y protocolos de almacenamiento de materiales peligrosos.