Meterse a la fila para comprar un sándwich de pollo cuanto antes le costó la vida a un hombre ya que otro no pudo contener el enojo al ver que querían ocupar su lugar.
El lamentable suceso se dio en restaurante Popeyes, ubicado en Maryland.
Se dice que la pelea se extendió a las afueras del establecimiento de comidas chatarras, en donde uno de los sujetos apuñaló al otro de acuerdo con las autoridades estadounidenses.
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La policía aún no da con el paradero del asesino, por lo que le solicitan que dé un paso adelante y se entregue cuanto antes.