Un estudio reciente ha revelado que los chimpancés, al igual que los seres humanos, son capaces de inventar gestos únicos que adquieren un significado especial en su comunicación.
Este hallazgo, documentado por científicos en el Parque Nacional de Kibale en Uganda, pone en evidencia la complejidad social de estos primates y su capacidad para desarrollar un «lenguaje corporal» personal.
El ejemplo más destacado de esta capacidad fue el gesto inventado por Lindsay, una cría de chimpancé, para pedirle a su madre, Beryl, que la llevara sobre su espalda. Cuando Lindsay tapaba un ojo con su mano, su madre respondía levantándola y colocándola en su espalda, un gesto que no se había observado en ningún otro chimpancé. Este comportamiento único se convirtió en una señal que solo madre e hija entendían.
Bas van Boekholt, primatólogo de la Universidad de Zúrich, explicó que este tipo de gestos puede ser considerado un «chiste interno» entre dos individuos, algo común en la interacción humana, pero ahora también observado en el comportamiento de los chimpancés. La investigación sugiere que este gesto, aprendido por Lindsay a los tres años y medio, surgió de un accidente relacionado con la falta de un ojo de la madre, lo que originó la conexión entre la acción y la respuesta.
El estudio, publicado en la revista Animal Cognition, respalda la hipótesis de que los chimpancés, al igual que los humanos, pueden desarrollar gestos idiosincráticos, señales con un significado específico que se transmiten a través de la interacción social. Aunque los chimpancés tienen un repertorio limitado de gestos, su capacidad para crear nuevos gestos y comunicarse de forma única sigue siendo un tema fascinante de investigación.
Van Boekholt destacó que la historia de Lindsay y su madre muestra una sorprendente similitud con la manera en que los humanos crean y comparten gestos y símbolos personales.
«Me han dicho que Lindsay sigue usando este gesto, aunque ya está demasiado grande para subirse a la espalda de su madre», comentó el investigador. Este hallazgo refuerza la idea de que, aunque los chimpancés no tengan un lenguaje como el nuestro, sus gestos pueden tener un significado profundo y personal.