Una joven de Sidney, Australia, tuvo que cancelar su fiesta de cumpleaños luego que aproximadamente 200.000 personas confirmasen su asistencia por Facebook, según informaron varios medios australianos.
La joven Jesse, de 16 años de edad, publicó en su muro que no tenía tiempo para invitar (personalmente) a cada uno de sus amigos y por ello les pidió que se lo comunicasen a otras personas.
Sin embargo, al día siguiente ella se sorprendió al notar que más de 20,000 personas habían confirmado su asistencia y hasta el día de hoy el número había aumentado hasta los 200,000; porque siguen contestando aunque se anuló su publicación.
Según un medio australiano, la invitación fue secuestrada por miembros del grupo «Anonymous» que la propagaron tal y como si fuese un virus a nivel mundial.
Al final, la joven pudo celebrar el cumpleaños con sus amigos en una fiesta privada en casa y con agentes de la policía en el exterior para evitar incidentes.