La melatonina, conocida como la «hormona del sueño», podría tener un papel crucial en la lucha contra el envejecimiento, según los científicos.
Esta hormona, producida por el cerebro para regular el sueño, disminuye con la edad, lo que a menudo lleva al insomnio.
Investigadores de la Universidad de Maryland y la Academia de Ciencias de Rusia están estudiando si la melatonina también influye en los procesos de envejecimiento.
Para llevar a cabo su investigación, los científicos utilizaron ratas con envejecimiento prematuro (OXYS) a las que administraron melatonina durante dos meses.
Comparando los resultados con un grupo de control que no recibió melatonina, descubrieron que la hormona ayudó a reducir la degeneración macular, una enfermedad que afecta la visión y que las ratas OXYS desarrollan a los 3 meses, equivalente a unos 65 años humanos.
Además de mejorar la visión, la melatonina también tuvo un impacto positivo en el comportamiento de las ratas, reduciendo la ansiedad asociada al envejecimiento.
También mantuvo su actividad física y su capacidad de aprendizaje. Estos hallazgos sugieren que la cantidad de melatonina en el organismo puede influir en la velocidad de envejecimiento de una persona.
Si bien estos resultados son prometedores, los científicos continúan investigando para determinar si la melatonina tiene el mismo efecto en los seres humanos.
Esto podría abrir nuevas puertas en la búsqueda de formas de envejecer de manera más saludable y mejorar la calidad de vida en la tercera edad.