Un hombre de 38 años, que había viajado a Turquía falleció después de someterse a un procedimiento de trasplante capilar. El cuerpo fue sometido a una autopsia y posteriormente trasladado a Reino Unido.
Actualmente, la Policía está investigando el caso como posible «homicidio imprudente» y ha interrogado a los empleados de la institución donde se realizó el trasplante. Sin embargo, las autoridades no han revelado la causa oficial de la muerte.
En los últimos años, las operaciones de trasplante capilar en clínicas turcas están ganando popularidad. La gente considera el lugar como uno de los mejores destinos para este tipo de procedimientos, debido a sus técnicas avanzadas y precios asequibles en comparación con otros países.
Sin embargo, no es un caso aislado, ya que otros turistas han fallecido luego de someterse a cirugías estéticas en Turquía. Por ejemplo, en 2024, una mujer británica viajó hasta allí para realizarse una abdominoplastia y una liposucción, pero al llegar al hospital, le ofrecieron también un ‘lifting’ de brazos, al que accedió. Más tarde, fue encontrada muerta con heridas abiertas en las axilas y los tríceps.