En todo el mundo se gastan anualmente billones de dólares en pastillas antidepresivas aunque estudios recientes señalan que son ineficaces en hasta el 40 por ciento de los pacientes que las consumen.
Sin embargo los doctores del Instituto Semel para la Neurociencia y el Comportamiento Humano en la UCLA están probando un nuevo tratamiento que consiste en disparar impulsos magnéticos en las profundidades del cerebro para combatir los síntomas de la depresión.
El procedimiento se llama Estimulación Magnética Transcraneal (TMS por sus siglas en inglés) y ya es una técnica aprobada por las autoridades sanitarias estadounidenses.
«La idea es usar métodos no químicos que puedan cambiar el funcionamiento del cerebro… al enviar pulsos energéticos repetidamente al cerebro cambiamos la forma en que le área trabaja incluyendo la red cerebral completa», aseguró el Doctor Andrew Leuchter, director del servicio clínico y de investigación del Instituto Semel.