Un análisis de más de 7 millones de registros de pacientes determinó que el sildenafilo, el principal componente de la viagra, y otros fármacos usados para el tratamiento de la disfunción eréctil, podrían reducir en casi un 70 por ciento el riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer.
En 2020 los científicos demostraron que el sildenafilo tiene un efecto secundario inesperado al activar los proteasomas, que son fábricas celulares para reciclar proteínas innecesarias o defectuosas.
Esto puede reducir la acumulación de placas amiloides, el resultado de la acumulación de una proteína en el espacio extraneuronal característico del alzhéimer y otras formas de demencia, impidiendo una correcta conexión entre las neuronas.
Otro nuevo estudio a gran escala llevado a cabo por un equipo de científicos de Cleveland Clinic, llegó a la misma conclusión, según un comunicado de este centro médico estadounidense.