El ciudadano Wilmer Saúl Landeros Bellorín, de 30 años, fue ultimado de tres balazos en la espalda anoche cuando viajaba en una moto en la carretera a Los Manchones, en Wamblán, municipio de Wiwilí, departamento de Jinotega.
Tras ser atacado, el infortunado quedó muerto sobre la moto roja que conducía y aún tenía puesta sobre su espalda una mochila con diferentes artículos y a pocos metros estaba su casco de seguridad de color azul.
Se presume que el asesino intentó obligar a Landeros a detenerse en la carretera y al no hacerlo le disparó en la espalda, matándolo al instante.
Algunos lugareños dijeron que Wilmer Landeros habitaba en la comunidad de Wamblán, hacia donde fue trasladado su cuerpo para velarlo y luego darle cristiana sepultura.