Tres personas fueron ejecutadas y sus cuerpos aparecieron calcinados en una camioneta en el municipio de Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, en lo que se presume es un ajuste de cuentas relacionado con el narcotráfico.
Según el periódico boliviano El Deber, el triple homicidio fue ordenado por 12 personas pertenecientes a una organización criminal dedicada al tráfico de drogas. Entre ellos, un brasileño identificado como Gabriel B. D., quien se encuentra prófugo y es señalado como el autor intelectual del crimen.
De acuerdo con los reportes oficiales de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen y de la Fiscalía, las víctimas fueron identificadas como Freddy V. L., Fernanda M. D. y Romy V. L. El asesinato fue ordenado debido a que estas tres personas no entregaron un cargamento de sustancias ilícitas.
Daniel Ortuño, el fiscal a cargo del caso, informó que tras el ataque fueron detenidos un ciudadano brasileño, Diego S. P., y un boliviano, Faddir B. V. El primero tiene vínculos con los sicarios y el segundo era amigo de Freddy, una de las víctimas.
El Instituto de Investigación Forense realizó un análisis preliminar de los cuerpos, indicando que las víctimas presentaban disparos en las extremidades inferiores, tórax y cabeza. Posteriormente, los cadáveres fueron quemados dentro de una camioneta marca Nissan.
Las autoridades están investigando si el grupo delictivo está relacionado con la banda de Lourival Máximo da Fonseca, un brasileño detenido en Bolivia en febrero y extraditado a su país.