El tiroteo en un club nocturno que en la noche del 24 de julio dejó dos muertos en Fort Myers, en la costa oeste de Florida, “no es un acto de terrorismo”, dijo la policía en un comunicado este 25 de julio.
“La investigación todavía está activa, así como la escena del crimen. Los investigadores trabajan para determinar la motivación”, escribió la policía de Fort Myers. No obstante, “confirmamos que este incidente no es un acto de terrorismo”.
Al menos dos personas fueron asesinadas y otras 14 heridas en la madrugada del lunes durante una fiesta para adolescentes en una discoteca, seis semanas después de la peor masacre de la historia reciente de Estados Unidos en un club nocturno gay.
La policía identificó este 25 de julio a las víctimas mortales como Shawn Achilles, de 14 años, y Ste’fan Strauder, de 18.
Además de los fallecidos, el tiroteo deja una quincena de personas heridas, de ellas cuatro de gravedad, por disparos en el estacionamiento de una discoteca de Fort Myers (Florida, EE.UU.) donde se celebraba una fiesta juvenil.
Los hechos ocurrieron sobre las 00:30 horas locales (05:30 GMT), cuando los “padres de los chicos que habían ido a la fiesta, de “edades entre 12 y 17 años”, llegaban a recogerlos para llevarlos de vuelta a casa, dijo en un comunicado la dirección del Club Blu.
El club descartó en un comunicado en Facebook que alguno o algunos de los chicos asistentes a la fiesta hayan sido los autores de los disparos en la discoteca de esta población ubicada en la costa suroeste de Florida.