El poderoso tifón Gaemi provocó lluvias torrenciales en Filipinas, dejando un saldo trágico de 13 fallecidos y miles de desplazados.
El sudeste asiático se encuentra bajo el azote del tifón Gaemi, que ha intensificado las lluvias monzónicas en Filipinas, dejando un saldo lamentable de 13 personas fallecidas y más de 600,000 desplazadas.
La tormenta, conocida como Carina en Filipinas, no tocó tierra directamente en el archipiélago, pero sus efectos han sido devastadores.
Las bandas exteriores del tifón descargaron aguaceros en gran parte de Taiwán, donde se prevé un impacto directo en el condado norteño de Yilan durante la tarde de hoy.
Según la Administración Meteorológica Central, el tifón se desplaza lentamente hacia el oeste con vientos sostenidos de 162 kilómetros por hora y ráfagas que alcanzan los 189 kilómetros por hora.
En Filipinas, las lluvias torrenciales provocaron aludes de tierra e inundaciones en varias regiones del país.
En la localidad montañosa de Agoncillo, provincia de Batangas, un deslizamiento de tierra sepultó una cabaña, cobrando la vida de una mujer embarazada y tres niños.
Además, un vendedor ambulante perdió la vida al ser golpeado por un árbol caído en otra población de Batangas.
La situación obligó a la guardia costera filipina a suspender la navegación de ferrys y barcos de carga, dejando varados a más de 350 pasajeros, trabajadores y conductores en los puertos marítimos.
La amenaza del tifón Gaemi se cierne ahora sobre Taiwán y China, donde las autoridades se preparan para enfrentar los embates de esta poderosa tormenta.