32 años de torturas sufrió una mujer cuya identidad no ha sido revelada y quien fue esclava sexual en Bolivia, a donde llegó huyendo de la inseguridad de su natal Argentina.
La mujer, fue secuestrada por una red de trata de personas cuando apenas tenía 13 años y fue llevada a Bolivia donde el novio de su hermana mayor le había ofrecido un trabajo.
Afortunadamente la mujer fue rescatada junto a su pequeño hijo, quien también será trasladado a Argentina.
Según medios locales, la mujer no tenía forma de regresar a Argentina, ya que su empleadora le retenía sus documentos.