Cadáveres en las calles, familias enteras contagiadas y muertos dentro de viviendas, ese es el panorama desolador que se vive en Guayaquil, Ecuador, donde el gobierno se ha mostrado totalmente indolente.
La situación se ha salido de control para las autoridades sanitarias y varias funerarias han cerrado sus puertas, por temor a saqueos en donde puedan perder materiales de reposición y ataúdes.
A la terrible emergencia también se suma que el presidente Lenin Moreno, ordenó toque de queda, según él para frenar los contagios, pero los ecuatorianos han acudido a los supermercados para abastecerse por la incertidumbre.
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Ahora se teme un incremento en la cifra de contagiados por COVID19, debido a la aglomeración de personas que acudieron a hacer sus compras.
Una de las funcionarias que más ha decepcionado a las ecuatorianas, es la alcaldesa de Guayaquil, quien a pesar de contabilizarse decenas de muertos en las calles, publicó tuits solicitando la autorización de Lenin Moreno para poder levantar los cuerpos.
“Ante la alarmante situación por el retiro de víctimas mortales que encabeza la Fuerza de Tarea Conjunta designada por el Gobierno Nacional, solicitamos a las autoridades competentes la facultad para realizar el levantamiento de cuerpos que permanecen en las casas, esperando ser retirados”, reza un mensaje en la cuenta oficial de Twitter de Cynthia Viteri.
Como si eso fuera poco la “servidora pública”, anunció que para el levantamiento de cadáveres solamente se hará con la presencia de dos testigos.
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“Se requerirá la presencia de dos testigos, a fin de cumplir el traslado del cuerpo con todos los protocolos de seguridad hacia uno de los cuatro contenedores que hemos puesto en consideración al Gobierno Nacional, para este fin”, dijo Viteri.