El papa Francisco aceptó este viernes la dimisión del cardenal estadounidense Donald Wuerl de su cargo de arzobispo de Washington, después de que fuera acusado de encubrir a curas pederastas, según un comunicado del Vaticano.
Monseñor Wuerl anunció en septiembre su intención de presentar su renuncia al sumo pontífice. Por lo que con este caso finalizan semanas de especulación sobre el caso. El Vaticano anunció este viernes la noticia.
Aunque el arzobispo presentó su renuncia a los 75 años, actualmente -con 78 años- a Wuerl se le permitió seguir ejerciendo como cardenal católico. Wuerl fue una de las personas más poderosas de la Iglesia Católica. Hacía parte del comité que nombraba obispos alrededor del mundo. A Wuerl se le acusa de encubrir a su predecesor Theodore McCarrick en casos de abuso sexual.
Wuerl nació en Pittsburgh, Pensilvania. Tiene un posgrado en la Universidad Católica de América, Universidad Gregoriana de Roma y es PhD en teología de la Universidad de Saint Thomas de Roma. El papa Juan Pablo II fue el que lo ordenó al servicio en 1986. Primero fue obispo auxiliar en Seattle y luego, durante 18 años fue obispo en Pittsburg hasta su nombramiento en Washington.
Un reporte de 900 páginas acusan a Wuerl del encubrimiento. A eso se le sumó una carta de un exfuncionario del Vaticano que tenía la misma solicitud. El exembajador del Vaticano en Washington Carlo Vigano publicó una carta en donde dice que el cardenal acusado de encubrimiento era «muy consciente de los continuos abusos cometidos por el cardenal McCarrick y las sanciones que le impuso el papa Benedicto».
La arquidiósesis de Washington respondió diciendo que «el cardenal Wuerl ha negado categóricamente que cualquiera de estas informaciones se le hayan comunicado a él».