Tornados sacudieron el área de Dallas el sábado por la noche ocasionando daño sustancial y la muerte de al menos once personas por accidentes viales o por la tormenta misma, la más reciente de una sucesión de eventos climáticos de invierno anormales en todo el país que el domingo podría incluir nevadas fuertes e inundaciones masivas.
El teniente de policía de Garland –unas 20 millas al noreste de Dallas–, Pedro Barineau, dijo que los cuerpos de tres personas fueron encontrados en vehículos. Esta cifra se suma a las ocho víctimas que ya habían sido reportadas.
Barineau señaló que algunos automóviles parecían haber sido lanzados desde la carretera interestatal 30 y la George Bush Turnpike cuando el tornado llegó a la zona la tarde del sábado.
“Es una devastación total”, describió el funcionario. Alrededor de 600 estructuras fueron dañadas; la mayor parte de ellas eran viviendas unifamiliares.
Fotos publicadas en Twitter y los sitios web de periódicos y estaciones de televisión de Dallas-Fort Worth mostraban coches destrozados y casas que se habían derrumbado o sin techo en las áreas más afectadas en los suburbios al noreste del centro de Dallas.
Televisoras locales mostraron casas que perdieron el trecho, vehículos dañados o volcados, una iglesia sumamente dañada, árboles derribados y escombros dispersos por barrios. El daño se extendió a aproximadamente una zona de 64 kilómetros (40 millas) de largo desde 32 km (20 millas) al sur de Dallas al noreste de la ciudad.
En el poblado de Rowlett, cerca de Garland, el detective Cruz Hernández, portavoz de la policía, dijo que varias personas estaban heridas, aunque no se conocía de inmediato la cifra exacta. Dos familias se atrincheraron en sus casas y rescatistas estaban tratando de sacarlas del lugar.
Los tornados, acompañados de lluvia torrencial, viento y algo de granizo, fueron parte de un sistema climático que podría ocasionar inundaciones fuertes del norte de Texas al este de Oklahoma, este de Kansas, oeste de Arkansas y partes de Missouri.
Pasajeros que esperaban su vuelo en Love Field, un importante aeropuerto de Dallas, fueron retirados de las ventanas de la instalación durante la tormenta. Fueron detenidos temporalmente vuelos del Aeropuerto Internacional Dallas-Fort Worth. El juego de los Mavericks de Dallas de la NBA fue retrasado aproximadamente media hora debido a la tormenta.
En el otro lado de Texas, una tormenta de nieve acompañada de una baja en la temperatura se espera que arroje hasta 40 centímetros (16 pulgadas) de nieve en el oeste de Texas y gran parte de New Mexico durante la tarde del domingo, según el meteorólogo del servicio nacional Brendon Rubin-Oster, en College Park, Maryland.
“Va a ser bastante peligroso para quien se exponga a estos elementos”, señaló Rubin-Oster.
Cayó nieve durante el juego del Sun Bowl entre Miami y la Estatal de Washington la tarde del sábado en la ciudad de El Paso, cerca de la frontera mexicana, donde se pronostica caerán de 15 a 20 cm (6 a 8 pulgadas) de nieve debido a la tormenta.
Además de en Dallas, las tormentas y tornados causaron diez víctimas mortales en Mississippi, seis en Tennessee y otra más en Arkansas, según el recuento de la prensa.
Las nuevas tormentas fueron las últimas en una cadena de incidentes climáticos inusuales la semana pasada que incluyeron nieve en la frontera de México y Texas.