La ciudad de Los Ángeles ha declarado el estado de emergencia debido a los incendios devastadores que comenzaron hoy en el barrio de Pacific Palisades y se han extendido a otras áreas de la ciudad.
El fuego ha arrasado más de 1.260 acres (5 kilómetros cuadrados) y continúa propagándose debido a los fuertes vientos que alcanzan velocidades de entre 80 y 110 kilómetros por hora.
Las autoridades han evacuado a aproximadamente 30.000 residentes de 10.000 hogares, y los bomberos están trabajando incansablemente para controlar las llamas. Según el jefe de Policía de Los Ángeles, Jim McDonnell, la situación es extremadamente difícil debido a la combinación de fuertes vientos y la topografía complicada.
Aún se desconoce la causa del incendio, pero las condiciones climáticas adversas han empeorado la situación. Las autoridades han instado a los residentes a seguir las órdenes de evacuación y a mantenerse alejados de las zonas afectadas.