La Iglesia católica polaca pidió perdón este lunes a las víctimas de abuso sexual por parte del clero, un mes después de que un tribunal de apelación confirmara una sentencia por la cual consideraba a la institución responsable de los abusos cometidos por uno de sus sacerdotes. El fallo condenaba a una congregación católica a pagar una indemnización de un millón de zlotys (unos 250.000 euros) a una víctima, y admitía que la Iglesia era responsable.
«Pedimos a Dios, a las víctimas de abusos, a sus familias y a la comunidad eclesial perdón por todo el daño causado a los niños y jóvenes, así como a sus parientes», escribieron los obispos en un comunicado después de haber celebrado una conferencia centrada en este asunto.
Además, sus miembros llamaron a denunciar «estos crímenes a las autoridades del Estado y a la Iglesia». Y añadieron: «Observamos con tristeza que también en Polonia hay casos de abuso sexual a niños y jóvenes por parte de algunos miembros del clero y aquellos que trabajan en la Iglesia. Repetimos con tristeza las palabras del papa Francisco: ‘El dolor de las víctimas y de sus familias es también nuestro dolor».
El papa Francisco se reunirá con obispos de todo el mundo en el Vaticano en febrero para discutir la protección de los menores. La Iglesia católica se ha visto salpicada por escándalos de abusos a menores que han salido a la luz en países como Chile, Australia o Irlanda. En España, la Iglesia ha creado una comisión reservada para combatir la pederastia después de que EL PAÍS haya publicado una serie de artículos que revelan cómo la institución silenció durante décadas los casos de abusos que ha conocido o instruido. En Estados Unidos, un informe publicado el pasado agosto reveló que más de 300 sacerdotes de Pensilvania habían cometido abusos sexuales y se identificaron más de 1.000 víctimas menores de edad.