Los tornados letales provocaron potentes nevadas, lluvias y vientos. Ya son 43 los muertos y las autoridades advirtieron que aún no llegó lo peor.
Una tormenta descargó nieve, aguanieve y lluvia helada en el noreste de Estados Unidos y dejó bajo advertencia a 18,4 millones de personas en todo el país.
Partes del norte de Nueva Inglaterra registraron entre 10 y 15 centímetros (4 a 6 pulgadas) de nieve el martes, mientras que en zonas del sur del estado cayeron unos 2,5 centímetros (una pulgada) o menos. En el centro del estado de Nueva York se acumularon entre 2,5 y 10 centímetros (1 a 4 pulgadas) de nieve, mientras que el norte hubo entre 7,5 y 17,8 (3 a 7).
Los meteorólogos apuntan que la tormenta está relacionada con el sistema que generó tornados letales en la región del Medio Oeste (Midwest) desde el sábado, y que después provocó importantes nevadas, hielo, lluvias, inundaciones y vientos a medida que se avanzaba hacia los Grandes Lagos. Esta perturbación mató a docenas, incluyendo muchos que se ahogaron y otros que perecieron en tornados.
El Servicio Nacional de Meteorología apunta que el miércoles los cielos estarán nublados y habrá algunas precipitaciones. La mayoría de las advertencias de inundaciones son en lugares de Missouri, Oklahoma, Arkansas, Illinois, Mississippi y Alabama.